Definitivamente Madrid Puro Reggaeton Festival ha sido cancelado. El puertorriqueño Daddy Yankee está en Madrid, pero no actuará. El festival tenía previsto celebrarse el viernes 15 y el sábado 16 de julio en el estadio Wanda Metropolitano de la capital. La Comunidad de Madrid denegó la licencia el jueves 14, a menos de 24 horas del comienzo de la cita reguetonera porque “las medidas de seguridad y la documentación presentada por la organización no reúnen los requisitos necesarios”.
Señalan que se ha entregado fuera de plazo y que “existen carencias en materia de seguridad”. La mañana del viernes se realizó una reunión de urgencia para ver si se podían subsanar las deficiencias, pero no ha sido posible. Se han vendido 40.000 entradas. Además de Yankee, estaban anunciados Bad Gyal, Omar Montes, Morad, Gente de Zona, Eladio Carrión, Natti Natasha o Juan Magán.
“Después de días y días sin dormir, del trabajo de más de 2.000 personas para adaptarnos a un nuevo recinto tratando de superar los innumerables obstáculos que las distintas administraciones nos han ido colocando en nuestro camino, finalmente las instituciones han decidido que más de 40.000 personas nos quedemos sin vivir este hito histórico”, anuncia en un comunicado el festival.
La cita originariamente estaba programada para La Caja Mágica, al sur de Madrid, pero el miércoles 13 se anunció el cambio de ubicación al estadio rojiblanco. El relato de este precipitado traslado tiene un nombre clave: Daddy Yankee. Hay que remontarse a antes de la pandemia, cuando se anunció para 2020 el festival con Bad Bunny y Yankee como principales reclamos. Como le pasó a todos los eventos culturales del mundo, este festival tuvo que reorganizarse para ver si podían contar con sus estrellas para 2022 (final de las restricciones) e impedir la devolución de las 18.000 entradas que ya se habían vendido.
El escenario en el Wanda ya estaba montado el jueves 14 y más de 100 periodistas nacionales e internacionales se habían acreditado para cubrirlo. Entonces los promotores recibieron el anuncio de la Comunidad “con sorpresa, estupor e indefensión”. “Con todos los pasos que la Administración ha ido dando en su relación con nosotros, hemos entendido que el festival contaba con luz verde”, explican. Ante la denegación de la licencia apuntan a una “clara falta de voluntad de la Administración autonómica” para que el concierto se realizase.
Una vez decidida la cancelación, queda ver qué ocurre con el dinero de la entrada. “El compromiso de la organización con todos los asistentes es inquebrantable, por lo que en los próximos días abriremos el plazo de devolución y os daremos toda la información para realizarla”, señala la organización.